Fernando Hierro firma un año con el Real Madrid
Poco a poco se van conociendo más datos sobre el gran fichaje del verano hasta ahora en el Real Madrid: la incorporación de Fernando Hierro como ayudante de Carlo Ancelotti en el primer equipo madridista.
Si hay una figura que ha sido clave en la negociación, ese es José Ángel Sánchez, director general ejecutivo del club. Él ha sido quien ha llevado personalmente las conversaciones con el malagueño y con el despacho de abogados que asesora al nuevo segundo entrenador madridista. Despacho donde trabajan excompañeros en el club y amigos del propio Sánchez.
Fernando Hierro firma solo por un año en estas funciones como ayudante de Carlo Ancelotti. Más que nada porque el malagueño quiere probar cómo se siente a pie de campo, en su trabajo diario y directo con los jugadores. Quiere probarse en este hábitat, donde hasta ahora no tiene experiencia alguna. De ahí que Hierro no quiera comprometerse por más tiempo. Para el exjugador blanco se trata de todo un reto. Si, como imagina, su experiencia responde a sus expectativas, él será el primero en querer continuar su carrera como técnico.
Hay otro dato que explica que su regreso al Real Madrid se limite a solo un año. Además del trabajo diario, quiere también experimentar cómo se siente dentro de la actual organización del club, empezando por el presidente Florentino Pérez.
Todos estos elementos explican también las condiciones económicas de su contrato. Fernando Hierro nunca ha exigido ninguna cantidad durante el tiempo de negociación. Es por eso que su ficha no va a distar mucho de lo que estaba cobrando su antecesor en el cargo, Zinedine Zidane, en torno al medio millón de euros anuales brutos. Estos números también se explican desde la misma filosofía de la enorme ilusión con la que Hierro emprende este auténtico reto.
La imagen de Di Stéfano, en la fachada del Bernabéu
El Real Madrid continúa rindiendo homenaje a su Presidente de Honor, Alfredo Di Stéfano. La fachada principal del estadio Santiago Bernabéu, en el Paseo de la Castellana, ha quedado cubierta con dos grandes lonas de 40 metros de ancho por 20 de alto, una a cada lado del escudo. En ellas se puede ver la imagen del mejor jugador de todos los tiempos y la leyenda «Gracias Alfredo».